La masía Winkelgut-Hof se encuentra en Colsano, a los pies del Monte Sole, en el lado más soleado del Valle Venosta. En sus terrenos todavía se encuentran muros de piedra en seco, reminiscencia histórica de la Via Claudia Augista, construida por los romanos. Convertirse en agricultor siempre ha sido una aspiración para Thomas, que estudió en la Escuela profesional de fruti-, viti-, horti- y floricultura Laimburg. 
En 1997 adquirió la masía de su padre, que ahora gestiona con su familia (representando la tercera generación en ocuparse de la finca). Manzanas biológicas de las variedades Gala, Red Delicious, Braeburn, Golden y Fuji han conquistado las colinas en torno a Winkelgut-Hof: "yo mismo soy un apasionado de cada una de estas variedades", afirma Thomas, que ha trabajado duro para convertir los cultivos a la bioagricultura. 
Desde hace décadas optimiza las variedades que produce, "se necesita constancia y mucho sacrificio personal". Exactamente esto hace de su trabajo una tarea entusiasmante para Thomas. El aspecto de la salud se ha convertido en uno de sus puntos fundamentales. "La agricultura biológica es la mejor para dar vida a un circuito natural". Y éste es precisamente el objetivo de Thomas.