Mi historia
Daniel Ladurner vive con su familia en Ciardes, a los pies del Monte Sole. Su huerto biológico en encuentra, sin embargo, en el Valle Senales. Que esta zona ya fuera habitable hace 5300 años lo demuestra Ötzi, la famosa Momia del Similaun encontrada congelada en el valle.
El joven agricultor Daniel cultiva sus manzanas biológicas según las normas europeas y las directivas de la asociación Bioland. Emplea exclusivamente abonos orgánicos, teniendo mucho cuidado al adoptar métodos de cultivo que protejan el terreno y que mantengan el delicado equilibrio de una zona montañosa sensible.
En cada recolecta, se muestra orgulloso del aspecto de sus manzanas. El sol de montaña las hace particularmente dulces, mientras que las variaciones térmicas entre el día y la noche que caracterizan el Valle Senales, contribuyen a la una maduración de las frutas más lenta, haciéndolas más crujientes. Daniel tiene su objetivo muy claro: manzanas saludables, sabrosas y de altísima calidad, preservando la naturaleza tal y como es.
Más productores orgánicos
"Todo lo que va en contra de la naturaleza no funciona a largo plazo".
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