Mi historia
La masía Huterhof, justo en la entrada de Silandro, es de propiedad de la familia desde hace 150 años. El agricultor Leonhard Wellenzohn realiza su trabajo casi en solitario, ayudado en las fases más intensas por su mujer Gerda y por su hijo. En los manzanos crecen las variedades Golden Delicious, Gala, Pinova, Red Delicious, Braeburn y Topaz.
Además, Leonhard produce sus vinos biológicos: un Zweigelt, un Pinot negro y un Solaris. En otoño, cuando se lleva a cabo la recolecta, afirma Leonhard, es posible evaluar lo que se ha hecho bien y lo que se puede mejorar.
Los Wellenzohn trabajan siguiendo los parámetros biológicos desde 1994, y se encuentran entre los pioneros de Silandro. Por aquel entonces lo “biológico” era un nuevo desafío y Leonhard estaba profundamente fascinado por la idea de cultivar bajo ese concepto, sobre lo que reflexionaba seriamente. Hoy Leonhard está seguro de haber tomado la decisión correcta, porque él mismo comprueba los efectos positivos del cultivo biológico para las personas.