Friedrich Zöschg, junto con su mujer Helga y su hijo Manuel, se encarga del cultivo de las manzanas biológicas en su masía. Además se ocupa de la gestión de las tierras de Helmut Plack en Tablà. El medio ambiente tiene un rol especial en la vida de la familia Zöschg. "Bio", explica Friedrich, "significa vivir junto a la naturaleza y respetar siempre sus peculiaridades."

Así, cada uno de sus días empieza mordiendo una manzana. Su estación favorita es el verano, cuando puede inspeccionar la campaña y ver su frutos crecer. Es entonces cuando piensa nuevas ideas, como la de aprovechar la fuerza mítica de los cristales de montaña. Ha estudiado en la Escuela profesional de fruti-, viti-, horti- y floricultura Laimburg en el Alto Adige.

Friedrich cultiva Golden Delicious, que crecen en las colinas donde reciben su "lado rojizo" típico de las manzanas Val Venosta. Produce también cerezas, melocotones, grosella, albaricoques y chirimoyas. Entre los árboles se encuentran zonas de hierbas aromáticas y flores como pasa en la naturaleza sin la intervención de la mano del hombre.