Ingredientes
para 15 bollitos
para la masa
350g de harina
2 cucharaditas de levadura de cerveza seca
65g de azúcar
125g de ricotta
95ml de leche (tibia)
1 huevo
2 pizcas de sal
60g de mantequilla (blanda)
para el relleno
125g de queso ricotta
150g de yogur blanco natural
50g de azúcar
2 manzanas Pinova
para el glaseado
200g de azúcar glas
½ limón (zumo)
Imprimir recetaPreparación
Para la masa, pon la harina, la levadura y el azúcar en el bol de la batidora planetaria y mezcla. Añade la ricotta y la leche caliente y pon en marcha la batidora. Añade el huevo y la sal y sigue amasando hasta que la masa esté dura, es decir, que se despegue del fondo y de las paredes del bol y se enrosque alrededor del gancho de amasar. En este punto, añade la mantequilla blanda en trozos, un trozo cada vez, y continúa amasando hasta que toda la mantequilla haya sido absorbida y la masa esté firme, brillante y elástica. Deja reposar la masa en un lugar cálido hasta que suba, aproximadamente entre 2,5 y 3 horas.
Para el relleno, lava y pela las manzanas Pinova, quítales el corazón y córtalas en cubitos. En un bol, mezcla el queso ricotta con el yogur y el azúcar. Añade los cubos de manzana Pinova y mezcla de nuevo.
Cuando la masa haya doblado su volumen, extiéndela con un rodillo sobre una superficie ligeramente enharinada hasta formar un rectángulo de unos 45 x 30 cm. Extiende el relleno de yogur y manzana por toda la superficie y luego enróllalo. Corta en rodajas de unos 3 cm y coloca los redondos, con el corte hacia arriba, en una bandeja de horno forrada con papel de hornear.
Deja reposar tapado durante 30 minutos más. Mientras tanto, precalienta el horno a 175°C (estático) y prepara el glaseado. Para el glaseado, pon el azúcar glas en un bol pequeño y añade el zumo de medio limón. Remueve bien hasta que el glaseado esté suave y muy espeso. Si es necesario, añade un poco más de zumo de limón, y si es demasiado líquido, añade más azúcar glas. Una vez transcurrido el tiempo de reposo, hornea los bollitos (una bandeja a la vez) durante unos 25 minutos, hasta que se doren. Sácalos del horno, déjalos enfriar 5 minutos y decóralos con el glaseado de azúcar.