25 min.
Tarta de manzana Bonita
cremosa y vegana
Ligera e irresistible, es perfecta para acompañar cada momento
Ideal para desayunos y meriendas, esta tarta vegana es ligera y fácil de preparar. Pero lo que sorprende es su irresistible sabor. El resultado: una tarta con un corazón cremoso, lleno de trozos de manzana, con una corteza dorada alrededor y un sabor no demasiado dulce, pero ciertamente agradable y rústico. Preparemos juntos esta tarta vegana.
65 min.
Ingredientes
para un molde de 20/22 cm
3 manzanas Bonita, lavadas, peladas y sin restos
2-3 manzanas Bonita para decorar
250 g de harina 00
110 g de harina de almendra
150 g de azúcar
200 ml de agua
200 ml de leche de almendras
60 ml de aceite de semillas
El zumo filtrado de un limón ecológico
1 cucharada colmada de extracto de vainilla
1 sobre de levadura en polvo
Azúcar glasé al gusto
3 manzanas Bonita, lavadas, peladas y sin restos
2-3 manzanas Bonita para decorar
250 g de harina 00
110 g de harina de almendra
150 g de azúcar
200 ml de agua
200 ml de leche de almendras
60 ml de aceite de semillas
El zumo filtrado de un limón ecológico
1 cucharada colmada de extracto de vainilla
1 sobre de levadura en polvo
Azúcar glasé al gusto
Preparación
Lava las tres primeras manzanas, pélalas, descorazónalas y córtalas en trozos grandes. Añade el aceite de semillas y bate hasta que esté suave y cremoso. En un bol bastante grande, combina la crema y los ingredientes secos (la harina, el azúcar y la levadura, bien tamizados) y mézclalos. Añade poco a poco la leche de almendras y el agua. Con la ayuda de una espátula, mezcla bien y déjalo a un lado.
Lava las otras manzanas, pártelas por la mitad y quítales la piel si lo prefieres. Con una mandolina, corta cada mitad en rodajas de 4 mm. Vierte el zumo de limón sobre las rodajas. Añade el extracto de vainilla a la mezcla, mézcla bien y vierte en un molde previamente enmantecado y enharinado. Empieza a rellenar con las rodajas de manzana. Si quieres, puedes colocar muchas rodajas cerca unas de otras en un patrón circular. Algunas caerán en el fondo, no te preocupes.
Espolvorea la superficie con un generoso puñado de azúcar moreno y hornea en un horno a 160°C precalentado. Deja cocer durante al menos 45 minutos, hasta que la superficie esté dorada y la crema del interior esté cocida. Saca del horno, déjalo enfriar, desmolda y decora con azúcar glas.
El pastel debe comerse pronto. Dura un máximo de 48 horas y está muy bueno recién horneado o calentado en el microondas. Si quieres, lo puedes acompañar con helado o fruta fresca.
Receta de Debora Vivian
Madame’s Kitchen
20 min.
50 min.
75 min.
25 min.