190 min.
Mezclar bien la mantequilla con el azúcar. Añadir poco a poco el azúcar con sabor a vainilla, la cáscara del limón rallada y los huevos. La masa deberá ser suave y espumosa.
Tamizar la harina con la levadura e incorporarla delicadamente a cucharadas a la masa junto a la leche. Verter en un molde untado con mantequilla y aplanar la masa.
Lavar y pelar las manzanas, dividirlas en cuartos y quitar las semillas; a continuación, colocar los cuartos de manzana sobre la masa. No presionar, ya que durante la cocción los trozos de manzana de hundirán por sí mismos en la masa. Hornear a 180° durante unos 45 minutos.
Cuando se enfríe la masa, untar la mermelada caliente de albaricoque y esparcir por encima las almendras troceadas.